Benjamin Louvet, gestor de materias primas de la gestora francesa OFI Asset Management, opina que en el contexto actual de incertidumbres en el plano geopolítico, y cambios en la política monetaria con consecuencias potenciales poco controladas, los inversores pueden encontrar una oportunidad a través de la exposición a los activos reales y los metales preciosos.
Entorno monetario y geopolítico
Según Louvet, “el primer semestre de 2022 ha deparado muchas sorpresas a los inversores. A principios de año, la economía mundial se recuperaba con fuerza, y el repunte de la demanda en la etapa post-covid ha sido muy dinámico, hasta el punto de que, en todas partes, la producción es difícil de monitorizar y las tensiones de precios, ya visibles en 2021, se multiplican y parecen destinadas a durar”.
Las cadenas de producción y suministro, muy afectadas desde la crisis del Covid, están volviendo a normalizarse, especialmente desde que en China las autoridades se han aferrado a su política de «Covid cero». La transición energética y la explosión de la demanda de ciertos materiales necesarios también contribuyen a la subida de los precios. Durante este periodo, la comunicación de los bancos centrales ha cambiado notablemente, y aunque las autoridades monetarias consideran los niveles actuales de inflación como transitorios, están preparando al mercado para el endurecimiento de sus políticas monetarias.
La invasión de Ucrania por parte de Rusia se produce en un contexto ya tensionado, y ha incrementado de forma generalizada la volatilidad en los mercados de materias primas. Las sanciones aplicadas y la gran disminución de las exportaciones desde la región están provocando un fuerte repunte del precio de la energía y de ciertos metales.,
Rusia es uno de los principales productores y exportadores de petróleo, gas, carbón y numerosos metales industriales. Entre estos últimos, el Níquel, el Aluminio y el Paladio son los más afectados: ya estaban bajo presión antes de la guerra.
Dudas sobre el crecimiento
En abril, un acontecimiento volvió a reconducir las dinámicas de los mercados: China tuvo que afrontar un fuerte repunte de la epidemia de Covid para lo cual, aplicó todos sus esfuerzos en limitar la propagación de la pandemia entre una población mal vacunada, estableciendo un drástico bloqueo que afecta a 400 millones de personas repartidas en 45 ciudades, es decir, más de dos tercios de la economía china en su conjunto.
Estas medidas, que ya duran casi 2 meses, provocaron una fuerte revisión a la baja de las expectativas de crecimiento mundial, no sólo por el estrangulamiento de la economía doméstica, sino también por el gran impacto negativo en las cadenas de producción y suministro. A lo largo del mes, los metales industriales, en niveles históricamente altos, corrigieron los precios de forma drástica; los metales preciosos se vieron afectados por la subida de los tipos reales, y los mercados anticiparon el endurecimiento monetario en Estados Unidos y Europa.
Precios y perspectivas
Al estar sometidos a influencias opuestas, las variaciones han sido finalmente escasas en ciertos metales durante la primera parte del año. *Así, el Oro y el Platino registraron rendimientos del 0,25% y del -3,09% respectivamente. La Plata y el Paladio, por su parte, cayeron un -8,3% y un -11,24%. En cuanto a los metales industriales, el Cobre, el Plomo y el Aluminio sufrieron una caída ligera en precios, tras haber sufrido el bloqueo chino, pero actualmente experimentan un repunte, ya que China está reabriendo su economía recientemente.
* Rendimientos desde el 30 de diciembre de 2021 al 13 de junio de 2022
Los metales preciosos han corregido recientemente debido a la subida de los tipos reales. Sus precios también incluyen una prima de riesgo geopolítico, que amortiguó la caída. Estos niveles deberían mantenerse en los próximos meses, en función de la evolución de los tipos reales, la inflación y la orientación de las políticas monetarias.
Dado que los bancos centrales están limitados en su actuación por el enorme endeudamiento público de los estados, la cuestión que se plantea ahora es saber qué cederá primero, la inflación o el crecimiento. En este punto, la decisión de Europa de suspender sus importaciones de petróleo de Rusia y la fuerte presión sobre los precios agrícolas podrían provocar que la inflación sorprendiera al alza, tanto en términos de un elevado nivel como de una larga duración, porque los factores que impulsan la inflación están más relacionados con problemas de oferta que de demanda. La subida de los tipos podría, por tanto, afectar al crecimiento mucho más rápidamente que a los precios.
Los bancos centrales se encontrarían entonces en un dilema que les obligaría a elegir entre una recesión o el retorno a unas condiciones monetarias más acomodaticias. En cualquiera de ambos casos, esto debería conducir a una corrección de los tipos reales, lo que debería apoyar los precios del Oro y la Plata. En particular, si los precios del petróleo y del gas siguieran subiendo y se mantuvieran elevados durante mucho tiempo, el impacto sobre la actividad económica sería fuerte.
Por otra parte, más metales industriales sufrieron las siempre presentes limitaciones logísticas, aunque también, y fundamentalmente, la política de COVID cero en China, que restringió la actividad. Así, las ventas de automóviles volvieron a tener un mes muy difícil, lo que hizo bajar las expectativas para el platino y el paladio, muy utilizados en esta industria.
La reciente reapertura de la economía china, y en particular de la ciudad de Shanghai desde el 1 de junio, debería traducirse en una recuperación del consumo interno, de la producción y del transporte de mercancías, sobre todo porque las autoridades chinas están intensificando las medidas de apoyo a su recuperación, centrándose en las infraestructuras, las energías renovables y los vehículos eléctricos.
Por todo ello, concluye Benjamin Louvet, “en un contexto de fuerte incertidumbre geopolítica y de cambio de la política monetaria con efectos potenciales aún poco controlados, la exposición a los activos reales y a los metales preciosos en particular parece más pertinente que nunca”.