La gestora nórdica Evli Fund Management opina que la Renta Fija Corporativa a corto plazo y con duraciones bajas será el tipo de activo en Renta Fija con mayor potencial para los inversores en el ejercicio 2023.
Y ello porque, tras un año 2022 catastrófico para el activo, en el cual las TIRes han sido históricamente elevadas en la Renta Fija, con diferenciales actuales deuda soberana-deuda corporativa que descuentan una recesión; y tras las fuertes subidas de los tipos de interés que han provocado una elevada volatilidad, la clase de Renta Fija con mayores posibilidades de aportar retornos atractivos para el inversor en 2023 será la Renta Fija Corporativa a corto plazo con duraciones bajas.
Entorno 2023
Según la gestora nórdica, en 2022 se produjo un cambio radical de expectativas para la Renta Fija, lo que provocó un hundimiento sin precedentes del activo. Y ello por una serie de factores: la invasión rusa de Ucrania, la fuerte subida de la inflación, especialmente los precios de la energía, y el cambio de política monetaria por parte de los bancos centrales, que pasaron de un período de
estímulos y tipos negativos a una fase de subidas de tipos rápidas y contundentes.
2023 ha comenzado con limitaciones en el suministro energético y unos precios de la energía históricamente altos, especialmente en Europa. Teniendo en cuenta el tono agresivo que todavía persiste por parte de la Fed y el BCE, las economías EEUU y de la Eurozona entrarán en una fase de ralentización, que probablemente derivará en una recesión a lo largo de este año.
Los diferenciales en la Renta Fija, ya se han ampliado, anticipando una recesión de la que se desconoce la intensidad y la duración. Por lo tanto, cabe suponer un escenario de volatilidad elevada en 2023, a medida que los indicadores macro reflejen hasta dónde alcanzará la mencionada recesión.
Dado que el nivel de la inflación se encuentra todavía lejos del objetivo de las autoridades monetarias, los bancos centrales continuarán trabajando para reducirla, tras haberse disparado este ratio en 2022. Sin embargo, en 2023 la previsible moderación de la inflación provocará menos subidas de tipos y de menor amplitud, según Evli.
Atractivo de la Renta Fija Corporativa
Esta normalización de los tipos de interés a lo largo del presente año, contribuirá a la estabilidad en la economía, y generará un entorno de rendimientos para la Renta Fija muy atractivo por primera vez en muchos años, en opinión de Evli.
La esperada recesión de 2023 generará niveles más altos de morosidad, aunque no exagerados desde una perspectiva histórica. En este escenario, el nivel de diferenciales actual para los inversores en Renta Fija Corporativa es similar al de la primavera 2020; sin embargo el apalancamiento de las empresas es muy bajo, por lo que los fundamentales son mucho más sólidos que antes de la pandemia.
Según la gestora nórdica Evli “rara vez se ha visto que en el inicio de una posible recesión, los fundamentales del Crédito sean tan sólidos como los actuales. A largo plazo, dichos fundamentos son el factor que determinará la evolución de los diferenciales de rendimiento entre la Renta Fija corporativa y la soberana”.
A esta ventaja derivada del contexto económico, y de los fundamentales de las empresas, se añaden las características propias de la Renta Fija que no tiene la Renta Variable: la obtención de un cupón, normalmente fijo, y la seguridad de recuperar el principal a vencimiento, a menos que se haya producido una quiebra del emisor.
Estrategia recomendada por Evli para el activo
Evli Short Corporate Bond es el fondo a través del cual Evli implementa la estrategia que aprovecha el potencial de la Renta Fija Corporativa en 2023. Una estrategia que se apoya en seleccionar las emisiones que pueden aportar más valor al inversor en Renta Fija, en función del escenario previsto por la gestora:
- Bonos del segmento crossover (frontera entre Investment Grade y High Yield), por su capacidad de optimizar el binomio rentabilidad riesgo.
- Emisiones de calidad de compañías que gozan de fortaleza en los flujos de caja y elevada solvencia. Empresas estables que puedan afrontar y superar cualquier fase del ciclo económico, independientemente de sus altibajos.
- Bonos corporativos europeos y nórdicos; tanto bonos con rating, como bonos sin rating, de aquellos sectores y empresas con mayor potencial de rentabilidad ajustada a su nivel de riesgo. En la esfera nórdica, más de dos terceras partes de las emisiones son sin rating.
- Una duración máxima de 2,5 años para controlar la volatilidad en los tipos de interés, y la gran mayoría de vencimientos como máximo a 5 años, para aportar certidumbre al inversor sobre la devolución de su principal.